viernes, 20 de marzo de 2015

LA UTOPIA DEL MERCADO


Marisol Buitrón Cabezas
Una vez establecida la economía, se habla de mercado, uno donde se relacionan los conceptos de vendedores de bienes y servicios y, compradores para los mismos, que en términos de esta ciencia son denominados oferta y demanda. Al interior de estos conceptos aparecen otros como indicadores (determinantes) que señalan en cada situación de análisis de mercado, qué se afecta, cómo se afecta y en qué medida varía, la oferta o la demanda según parezca.
Si bien por un lado la economía se basa en el flujo real del dinero en este punto es indispensable hablar de un comportamiento básico en esta relación compradores-vendedores como lo es el equilibrio. Pese a que la economía siempre estará en total desequilibrio, se puede hablar con ambición de un equilibrio parcial como modelo de equilibrio general, uno donde siempre se esté buscando que tanto las cantidades ofrecidas como demandadas sean iguales. Si bien es cierta la realidad es que el equilibrio como tal difícilmente existirá.  De un lado los compradores estarán siempre a la espera de lo que les gusta, lo que necesitan y lo que quieren y pueden comprar aparezca dentro de lo que “el mercado” presente a bajos precios, que sean de fácil acceso económicamente, pero, a su vez los vendedores esperan lo que ellos ofrecen se venda de la mejor manera posible y la mejor manera es al mejor precio es decir precios altos, con una productividad a bajos costos; bajo esta influencia casi nunca en el mercado se logra que cuantitativamente lo que se oferta sea igual a lo que se ofrece.
Dado que los deseos de compradores y vendedores no son iguales hablando en términos de precios y cantidades; el mercado inventa ciertas estrategias donde empieza a jugar la creatividad y la capacidad de la publicidad de venta y es que el talento para persuadir a los vendedores en este punto es indispensable; pues bien sabemos que no todo lo que se produce se vende como se desearía; y la verdad es que el consumidor está en desventaja en cierta medida respecto del vendedor sometiéndose a los análisis de mercado para saber qué compra, cuándo y en qué cantidad; para así, de esa manera, sacar provecho en la productividad y sus ventas lo que al final quiere decir que quien le dice al vendedor cuanto producir es el comprador, solo que no como se esperaría, pues este “juega” estratégicamente a su vez con el consumidor. Al final los determinantes en cada situación permiten saber del comportamiento entre la oferta y la demanda y, la cercanía quimérica al “equilibrio”.




No hay comentarios.:

Publicar un comentario