Por: Andrés
Contreras
El pasado 20
de Agosto el gobierno venezolano, en cabeza de su presidente Nicolás Maduro
decreta el estado de excepción para seis municipios fronterizos en el estado
Tachira,en la frontera con Colombia, esta medida sugiere la supresión temporal
de ciertos derechos y garantías constitucionales, salvo aquellos considerados
fundamentales ,concediendo al gobierno facultades especiales. Sumado a esto
inicia una serie de desalojos y deportaciones arbitrarias a colombianos
residentes en el vecino país.
Lo anterior es solo una muestra de las torpes
políticas gubernamentales provenientes del ejecutivo venezolano, que ya han
dado sus frutos en materia económica (recordemos la reciente catástrofe
financiera causada por el aumento desmedido de la cotización del dólar
paralelo) y que esta vez pasa factura sobre el ámbito diplomático y las
relaciones internacionales con nuestro país.
El principal
objetivo del estado de excepción es disminuir el éxodo de colombianos que
ingresan de manera ilegal a Venezuela y reducir el impacto que tiene el
contrabando hacia Colombia sobre la economía bolivariana así mismo minimizar la
influencia de los grupos ilegales sobre el vecino país, logrando de esta forma restablecer el orden, la paz, la
convivencia de la región venezolana fronteriza con Colombia. Sin embargo vale
la pena analizar cuál es la verdadera cara
de esta realidad hasta ahora contada a medias, no solo por las consecuencias
sociales, económicas y políticas que esta situación trae para Colombia si no porque también de aquí en adelante esto
condicionara la posición que debe tomar el gobierno de Juan Manuel Santos para
enfrentar este desafío y marcara de forma permanente las relaciones
diplomáticas entre ambos países, mientras continúe el régimen de Maduro.
Para el
Gobierno venezolano, la porosa frontera binacional de casi 2.300 kilómetros es
el origen de los principales problemas que aqueja a su país: el
desabastecimiento, que atribuye al
contrabando de productos subsidiados; la delincuencia, que Venezuela atribuye a
la importación de modelos colombianos del crimen organizado y la subversión
política, que achaca a conspiraciones impulsadas por el ex presidente Álvaro
Uribe y la carga social que significa para su país el éxodo de ciudadanos
colombianos, que cifró en 121.000 inmigrantes solo en lo que va de 2015.No
obstante para nadie e s un secreto que el estado venezolano pasa por una grave
,por no decir la peor, crisis de toda su
historia: el derrumbe de los precios internacionales del petróleo, el
desabastecimiento de víveres, problemas de orden publico,desligitimidad de las
instituciones estatales, violación de los derechos humanos ,altos índices de
corrupción y la represión de los medios de comunicación. Los anteriores son
solo unos de los muchos problemas que el chavismo pretende desviar de la
atención de la opinión pública y la comunidad internacional, a través de
mecanismos como el recientemente implementado en el área fronteriza, los cuales
resultan poco acertados porque vulneran en gran medida la dignidad, el buen
nombre y los derechos fundamentales como el derecho a una vivienda, de miles de
colombianos que residen actualmente en el vecino país.
Por
otra parte el retorno inminente de compatriotas hacia Colombia propone un
desafío al gobierno nacional el cual se verá obligado a tener en consideración
el replanteamiento de sus políticas de gobierno en materia de educación, salud, empleo y además
tiene la obligación de brindar una atención especial a los deprimidos sectores
industrial y comercial, perjudicados en gran medida por la crisis fronteriza.
La crisis en la frontera genera perdida en la economía de ambos países y está situación se siente mucho más en las regiones fronterizas como es mencionado en el texto se comparte más de 2000 km de frontera y en estas regiones las personas tienen la oportunidad de ser más selectivas debido a que tienen dos comercios nacionales diferentes de donde pueden obtener y escoger los mejores precios y la más alta calidad; sin embargo ante el cierre de la frontera se genera una serie de situaciones como: pérdida de empleos,deportaciones, pérdida de venta para los oferentes,retención de materias primas,también se debe tener en cuenta que las deportaciones generan aumento en la tasa de desempleo de nuestro país en los diferentes lugares que llegan.
ResponderBorrarJennifer L
Si. y es por esta razón que el gobierno tiene y esta en la obligación de replantear sus políticas en materia de educación,salud y empleo brindar un acompañamiento a los compatriotas que regresan a nuestro país,ademas hay que reconocer que aunque el contrabando y las actividades de grupos ilegales en el área fronteriza no son la causa total de la crisis que vive la revolución bolivariana ,si son una realidad y por lo tanto el gobierno colombiano no puede eludir su responsabilidad en este asunto.
ResponderBorrarCreo que se debe hacer un seguimiento riguroso a las personas que vienen de este país debido a que siempre hay personas que aprovechan la situación de otros para obtener beneficios.
ResponderBorrar