JULIAN ALEXANDER GÓMEZ ORTEGA
El sector cementero en
Colombia siempre ha dado de que hablar, debido a la gran competencia que de
alguna manera fue una competencia “sucia” donde los grandes del sector llevaban
los precios de mismo hasta cifras muy bajas con el fin de quebrar las empresas
pequeñas y sacarlas del mercado, inclusive se llegó hasta los 8mil pesos el
bulto de cemento, estrategia usada no para el beneficio del consumidor sino
para acabar con la competencia de empresas menores, y debido a esto la mayor participación del mercado se
encuentra concentrada en tres grandes empresas, las cuales son Argos (
Colombiana ), Cemex ( Mexicana ) y Holcim ( Suiza ). Estos tres grupos
económicos de talla mundial entraron al mercado por medio de la adquisición de
otras cementeras: Cemex (adquirió Cementos Diamante y Samper), el Grupo Argos
(Cementos Argos, Cementos El Cairo, Cementos Caribe, Cementos Paz del Río,
Cementos Nare, Cementos Río Claro, Tol Cemento, Cementos Andino, Concrecem y
Cementos del Valle) y el Grupo Holcim (propietario de Cementos Boyacá).Todas
estas empresas ofrecen productos muy similares y a precios relativamente
semejantes, lo que hace que se cumplan las condiciones que se plantean en la
definición del oligopolio. Entre
éstas tres empresas tienen una participación de cerca del 98% en el mercado
nacional, lo que muestra la gran concentración que existe en este oligopolio.
El 2% restante se lo dividen dos empresas llamadas Cementos del Oriente (0.4%)
y Cementos Tequendama (1.6%). A su vez, Argos tiene una participación del 45%
en el mercado colombiano; Cemex del 36%, siendo líder del mercado cementero en
la ciudad de Bogotá y finalmente, Holcim tiene una participación de cerca del
17%, debido a que únicamente cuenta con una planta de producción en Boyacá.
Éste sector tiene una gran importancia en la
economía colombiana, pues presenta un crecimiento continuo e importante. Éste
crecimiento se da principalmente por el auge en la construcción a nivel
nacional, pues el cemento representa cerca del 25 % de los costos totales de
las empresas constructoras, y también por las grandes inversiones que han hecho
las empresas cementeras en sus fábricas, para lograr una mayor productividad y
eficiencia en el proceso de producción del cemento.
Las ventas del cemento
tuvieron un crecimiento en el 2011 de entre el 5,5 % y el 6,5%, mientras que
las del hormigón (producto importante de éste sector económico) fueron entre el
8,25 % y el 9,75 %. Esto indica que el sector cementero se está desarrollando
de muy buena manera, ya no solo es importante el cemento en sí, sino que los
otros productos de éste sector están alcanzando altos niveles de crecimiento.
En Colombia se prevé que el
sector cementero seguirá en crecimiento durante los próximos años, en gran
parte por los importantes gastos que se harán en el tema de infraestructura (la
principal necesidad del país en estos momentos para muchas personas), los
cuales se dirigirán al segmento del transporte (principalmente carreteras) y la
vivienda, en dónde el cemento y los diferentes productos de éste sector son
fundamentales.
El sector cementero es un
sector de gran importancia a nivel nacional, debido a que ha estado en
constante crecimiento desde los últimos años y representa una buena porción del
PIB (0.41% entre las cementeras más grandes). Esto se debe principalmente al
incremento de proyectos de construcción de vivienda y el número importante de
obras públicas y privadas realizadas en varios puntos del país. Los productos
que ofrecen las compañías cementeras en Colombia son muy similares, por lo que
la diferenciación se da más en los servicios que éstas ofrecen
El oligopolio es el control de un sector del mercado, a través de cualquier método legal o ilegal, regulando la obtención de insumos, la oferta de productos finales, y la fijación de precios, por medio de una o dos empresas como es este caso del sector cementero
ResponderBorrarEs adecuado? Por supuesto que no para los consumidores, pero para los productores, es una mina de oro. considero que se debe evitar estas situaciones, sin
importar lo lucrativo que pueda ser, ya que no es más que el reflejo puro del espíritu capitalista, que no considera la vida, la tranquilidad, la salud, y demás condiciones que merecen las personas y, puede que en productos no tan necesarios sea algo irrelevante, algo como la Coca-Cola, o la televisión satelital, pero si todos los mercados tienden a esto, cuando se llegue a una situación de salud pública, o
bienestar general, se causarán grandes estragos a la población solo por la ambición de unos pocos, y la falta de ética y compromiso de las entidades gubernamentales.